viernes, 31 de enero de 2014

El camello de arena (Leonora Carrington) Introducción y traducción de Olga Orozco




En la zona amarilla del desierto, la zona del peligro extremo, aparece una mujer vestida de dama del halcón negro. Ha ganado el torneo de la amazona del caballo lanzado al mayor vértigo. Los centinelas tienen orden de permitirle cruzar todas las fronteras. Leonora Carrington penetra pues a través de las paredes en pabellón central de la gran torre que se alza entre las arenas. Allí están grabadas las fórmulas para el encantamiento y el desvarío. Allí tiene lugar la transmutación de las palabras y los colores. Hay un telescopio, y a través de las iluminaciones, las potencias celestes se arrebatan en espíritu para integrar un sistema planetario en el que tiene reservado el lugar de la luna. Hay también un microscopio, y a través de los organismos del sueño, las razones oscuras la arrebatan en forma de cebra heráldica a los lugares prohibidos, donde los animales y los hombres usan sus máscaras más secretas, sus máscaras para ser otros.

Olga Orozco

El camello de arena

Dos muchachos, A y B, vivían en el bosque con la Vieja Abuela. La Vieja Abuela estaba siempre vestida de negro como un paraguas y tenía la cabecita redonda y roja como una manzana. Sus jaboncitos y sus piyamas también eran negros, ese era su color preferido.
A y B fueron a jugar en el bosque con la arena blanca, construían un camello. Cuando ese camello estuvo terminado tenía una mirada tan viva que A y B decían – El Camello está vivo, tiene mirada mala.
Era verdad pero cayó la lluvia y el Camello se fue en un arroyo de arena. –Bien hecho- dijo la abuela- ese Camello no me gustaba a causa de su mirada.
Pero al hacer el Camello siguiente A y B mezclaron un poco de manteca y éste tenía todavía ojos mucho más malignos que el otro. Este  Camello permanecía entero debajo de la lluvia.
-Si se le hace alguna magia se levantará-dijo B, eso sería útil pues no tenían perro. Entonces el Cuervo bajó del árbol diciendo: -Yo sé cuál es la magia que hay que hacerle al camello. Así rasguñaba con su pata unas letras sobre la frente del camello y el camello se levantó con una siniestra sonrisa; caminaba. Se dirigió a la casa. Es porque teme a la lluvia- dijo el Cuervo-. La abuela no se va a alegrar de que entre ese camello; ella hace dulce de castañas,-dijo A.
Entonces los muchachos A y B se ocultaron detrás de un árbol pues sabían que la Abuela se enojaría cuando el Camello de Arena entrase en la cocina y tenían razón, ella estaba furiosa.
Pronto vieron volver al camello que tenía la cabeza de la abuela dentro de su boca y ella estaba hacia arriba con el aspecto de un paraguas. – Es porque teme la humedad- dijo el Cuervo-
-El dulce se quema en la cocina, nadie lo cuida-
A y B fueron a la casa para ocuparse del dulce.
-          Se comerán frituras- decían A y B, después de una semana en la que solo comieron dulce de castañas-  pero el Camello se paseaba lentamente por los bosques con la Abuela como Paraguas y no la soltaba jamás.
-          El Cuervo vio todo – Ustedes me deben las joyas de la abuela-dijo- y sacó de  la casa un gran cofre de joyas.
-          Hay que utilizarlas bien- entonces colgaba las joyas de la Abuela en el árbol y había que reconocer que eso quedaba hermoso.

Leonora Carrington

traducción Olga Orozco


en "A partir de cero Nro 1 (2da época)" dirigida por Enrique Molina- 1956-